SÍNTOMAS DE GINGIVITIS: ¿QUÉ APARIENCIA TIENE LA ENFERMEDAD DE LAS ENCÍAS?

Las encías sanas son firmes y de color rosado. Si tienes encías enrojecidas, hinchadas o inflamadas al cepillarte los dientes, es probable que tengas gingivitis. Todos estos signos indican que se necesita un cuidado oral adecuado.

Si bien parece algo frecuente, nunca es natural el sangrado de las encías durante el cepillado o el uso de hilo dental. Quizá pienses que te estás cepillando demasiado fuerte, pero el sangrado frecuente de las encías es un signo probable de que tienes gingivitis. La placa y el sarro se acumulan en los dientes, por eso las encías se irritan más; y eso hace que se hinchen, se enrojezcan y se inflamen. Debido a estas situaciones, las encías sangran con facilidad, especialmente cuando te cepillas o usas hilo dental. Según la ADA, el sangrado de las encías causado por la gingivitis es totalmente reversible. Cepillarse y usar hilo dental dos veces al día y usar un enjuague bucal antiséptico como LISTERINE ULTRACLEAN® o el tratamiento de las encías LISTERINE® son pasos importantes para detener el sangrado de las encías y revertir la gingivitis.

Hay indicios de que el mal aliento o la halitosis también puede indicar un estado inicial de la enfermedad de las encías. El mal aliento en general es consecuencia de la acumulación de placa en la lengua y puede ser un signo de que la placa y las bacterias no se están eliminando correctamente.

Si no se abordan los primeros signos de la enfermedad de las encías, la gingivitis puede empeorar y progresar a periodontitis. El dolor de dientes al masticar, la sensibilidad de los dientes al calor y al frío, las encías retraídas y los dientes flojos son signos de un avance en la enfermedad de las encías como periodontitis moderada o avanzada.